ÁRBOLES Y MORTALES UNA RELACIÓN COMPLEJA

El guayacán amarillo, conocido científicamente como Tabebuia chrysantha (Jacq.)28/07/2017

La real academia de la lengua española le otorga al árbol la definición de “Planta perenne, de tronco leñoso y elevado, que se ramifica a cierta altura del suelo” pero más allá que solo un ser vivo de grandes proporciones, un árbol es una máquina de oxígeno y fuente de vida, una parte esencial para la sostenibilidad de los ecosistemas y alojamiento de otros seres animados.

Al igual que los demás individuos de reino vegetal los árboles liberan oxígeno por medio del proceso de la fotosíntesis, en este las moléculas de dióxido de carbono (CO2 )  con ayuda de la energía lumínica se transforman en oxígeno (O2), esta reacción química es de suma importancia, ya que como se puede inferir es un proceso inverso a la respiración de los seres del reino animal, es decir hay un complemento que permite la sostenibilidad y equilibrio entre las dos sustancias ya mencionadas. Se estima que al menos el 28% del oxígeno que se produce en la tierra proviene  de los árboles, el resto se da gracias a la fotosíntesis de las demás plantas del reino vegetal, especialmente las marinas. 

Los árboles como hogar; además de brindar sus dulces frutos, una hermosa vista y cálida sombra, sirven como refugio de animales que los toman por hogar tal como los monos, ardillas, perezosos, guacamayas, entre otros animales que utilizan las fornidas y siempre útiles ramas para protegerse de sus depredadores. Adicionalmente a esto los árboles son capaces de preservar los ecosistemas en los  que se hallan  previniendo el desbordamiento de ríos y deslizamientos de tierra, disminuyendo la temperatura,  reteniendo nutrientes, entre otros beneficios.  

Inspiración humana es otra de las cualidades que se le atribuyen a los árboles; seguramente has escuchado que Isaac Newton descubrió la gravedad bajo un árbol de manzanas, un hecho controversial  que deja entrever la relación del mortal y la naturaleza. Fiona Stafford: "Los árboles evocan todos los sentidos: olores frescos, el sonido de las hojas, el cantar de los pájaros, la textura de su corteza. Todo esto los hace llamativos, especialmente para la gente de la ciudad”  mencionaba esto al explicar  las razones por las que la literatura contemporánea está “obsesionada” con los árboles. Al fin y al cabo no es arduo trabajo recordar instantes marcados por sufrimiento, alegría, amor, indignación o tranquilidad  al lado de un árbol. 

Los árboles nos hacen vibrar de emoción, nos satisfacen con el dulce de sus frutos y nos invitan a desempolvar  lo más profundo de nuestra mente mientras que admiramos su imponencia y nos benefician sin reproche alguno, hoy en su día la mejor forma de agradecérselo más que preocupándonos por las planas cifras de reportes estadísticos, es con buenas acciones que marquen la diferencia desde la conciencia, y tú ¿Cómo lo haces? 

"Donde hay vida hay árboles. Donde hay hombres hay pensamiento. No se puede pensar sin lenguaje.. El árbol del lenguaje tiende sus bifurcaciones por toda la tierra. Es el árbol que nos habita. En este planeta donde constantemente "La  tierra va a dar a luz un árbol".

Tomado de: Manifiesto de árbol que sueña ser poema

 

ANALOGÍA DEL MORTAL

El hombre no está lejos de ser como el árbol, pues bien analizados subyacen en él los complejos componentes que dibujan el carácter; diversos e ineludibles así son los árboles, unos escondidos por sus pecados en las profundidades donde la amnistía los rodea, uno que otro es un parásito que busca camuflarse,  hallamos también los que se paran ecuestremente en un pedestal caprichoso esperando veneraciones;  además están  los aglomerados que se funden en el trajín de la selva y los que prefieren la soledad de una sabana abierta.  

Las raíces marcan la parada de lo que va a ser de ese árbol, salidas de las semillas, proporcionan inicialmente todo lo que el individuo necesita para subsistir, a medida que la curiosidad y la introspección sabia se apoderan de la mente, las raíces crecen desaforadamente agregando valor al conjunto celestial. 

El tronco se forma con el paso del tiempo y es la estructura moral que lo sostiene, es mejor ser prudente antes que cantar "árbol que nace torcido jamás su tronco endereza", las vivencias sociales cubren entusiasmadamente la corteza exterior, unos fabrican espinas para no ser heridos, otros son demasiado lisos para que nadie llegue a su compleja punta, hay superficies débiles que por todo decaen como las apariencias y otras no muy comunes que resisten cualquier chaparrón. 

Las ramas y troncos son el inicio de la emancipación, se van moldeando de acuerdo a la disponibilidad de recursos y creatividad para extenderse, son de suma importancia pues marcan el mapa de producción en que se enfocan los esfuerzos.  Las hojas, flores y  frutos son el producto final, al igual que la laguna reflejan lo que es el árbol en realidad, pues simbolizan la percepción, ¿Quién acaso no recuerda la dulzura de un mango maduro y la amargura del limón?

El árbol no decide dónde ni cómo nace, pero sí puede estrecharse hacia adelante, surgir con vigor para llegar a ser inolvidable.  

INSTITUCIÓN EDUCATIVA BRAULIO GONZÁLEZ
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